
Un poco de historia…junio, el mes del orgulloEl 24 de junio de 1969, el inspector Seymour Pine había hecho una primera visita al bar. Arrestó a algunos empleados y confiscó licores. No satisfecho con lo hecho, continúo rondando el bar ubicado en la calle Christopher, muy cerca de la Séptima Avenida, en el barrio de Greenwich Village, por varios días más.Eran días en que la legislación de la mayoría de las poblaciones de los Estados Unidos prohibía las relaciones entre personas del mismo sexo. La única excepción era Illinois. El acoso hacia el Stonewall era atípico. Si bien quienes asistían a bailar en los dos pisos que conformaban el bar estaban acostumbrados al acoso policial, y lo veían como algo con lo que tenían que lidiar cada noche de copas y baile, comenzaban a cuestionar esarealidad.La noche del 28 de junio de ese mismo año, hubo quien no cedió a la presión policial y se opuso a ser arrestado. A esta persona, le siguieronotras y cuando la policía neoyorquina se dio cuenta, adentro y afuera del bar había centenas de personas arrojándoles objetos, monedas y exigiendo su retirada. No tuvieron más remedio.La mayoría de la prensa dio a conocer la noticia, poniendo énfasis en que algunos policías fueron lastimados, y dando muy poca voz a quienes participaron en los sucesos por parte de la sociedad. Sin embargo, muchas personas regresaron el 29 de junio y los días subsecuentes para mostrar que no se iban a dejar intimidar, y a pesar de que el bar estaba en ruinas, continuaron resguardándolo, conjuntándose para organizarse e impedir más abusos del tipo.Entre esas voces anónimas para la prensa estaban la de las drag queen Marsha P. Johnson, afroamericana con un gran ímpetu, y la de Sylvia Rivera, de origen puertorriqueño, quienes fueron de las primeras personas en comenzar a aglutinar a más personas para exigir no sólo el cese de los operativos policíacos sino el respeto a sus derechos y a su integridad como personas.De esta manera, se conformó el Frente de Liberación Homosexual, la primera organización del tipo, inspirada en el movimiento del Frente Nacional de Liberación de Vietnam, al cual pertenecía Rivera, y se decidió tomar al 28 de junio como una fecha clave para exigir a los gobiernos el reconocimiento de la ciudadanía y la igualdad de derechos de las personas lesbianas y homosexuales.La labor de Sylvia Rivera y Marsha P. Johnson no quedó en haber sido la parte visible de los sucesos de Stonewall. Su experiencia en los movimientos de reconocimiento de los derechos civiles de las personas afrodescendientes se tradujo en la creación de la organización Street Transvestite Action Revolutionaries, enfocada en el apoyo a chicas trans en situación de calle, la mayoría de ellas, de origen afro o hispano, desalojadas de sus hogares por sus propias familias.Las propias Sylvia y Marsha habían vivido esa situación y deseaban dar apoyo a “sus hermanas” para evitar que se repitieran situaciones que ellas mismas habían padecido. Ambas fueron parte de los orígenes de un movimiento que al paso de los años trascendería las calles de Greenwich Village y comenzaría a globalizarse. En otras ciudades de Estados Unidos se comenzó a rememorar el hecho al año siguiente, pues varios grupos de personas comenzaron a salir a las calles para exigir las mismas demandas de quienes habían vivido los sucesos de Stonewall.Al paso de los años, el 28 de junio, pero, sobre todo, el último sábado del mes de junio, pasó a ser un día en el que muchas de las avenidas principales de ciudades de todo el mundo se colorean de múltiples tonalidades para visibilizar a las poblaciones LGBTTTIQ+, sus necesidadesy sus demandas.